En colaboración con varias universidades del país, opera en el campus Caborca de la Universidad de Sonora, el Observatorio virtual de riesgos y calidad de vida, que busca recabar información sobre comportamientos de riesgo y calidad de vida de los estudiantes.

Libia Yanelli Yanez Peñúñuri, profesora Investigadora adscrita al Departamento de Ciencias Sociales de la Unidad Regional Norte (URN), trabaja en el proyecto, el cual fue aprobado por el consejo divisional desde agosto del 2019, empezando con los preparativos en noviembre pasado, pero será en agosto cuando inicie de lleno con los alumnos de primer ingreso al ciclo escolar 2020-2.

Actualmente son cuatro las universidades con observatorios: Universidad de Guadalajara (UdeG), Universidad de Baja California (UABC), Universidad La Frontera, en Chile, y ahora la Universidad de Sonora; para ver las instituciones, se puede ingresar a la red de observatorios en el sitio https//riesgoyvida.wixsite.com/redobservatorios.

Cada observatorio se conforma como un proyecto de colaboración con la Universidad de Guadalajara, que genera el soporte técnico y asesoría constante para su funcionamiento y toma de decisiones, indicó la docente de Psicología.

“Tiene como propósito que la comunidad universitaria y científica cuente con información de calidad sobre los comportamientos de riesgo y calidad de vida de los estudiantes y que ello permita la toma de decisiones informada en beneficio de las condiciones de vida y la salud de los estudiantes”, añadió.

Esto genera conocimiento científico a partir de las generaciones que ingresan a la universidad y su seguimiento sobre los comportamientos de riesgo (drogadicción, alcoholismo, tabaquismo, etcétera) y la calidad de vida de los estudiantes y difundir el conocimiento generado en la comunidad universitaria científica.

¿Cómo opera?

El sistema consiste en un cuestionario que contesta en línea el estudiante de primer ingreso, y la base de datos que se obtiene es concentrada en los servidores del Centro Universitario del Sur (Cusur), de la UdeG; a partir de que la base de datos está completa, se envía un informe para los administradores del Cusur por grupo.

“Después de generar información, se procesa para hacer análisis a mayor profundidad que permite generar información que se publica en artículos de investigación libros o tesis; este conocimiento permite redirigir las estrategias de intervención en los estudiantes”, precisó.

Yanez Peñúñuri indicó que en este proyecto participan alumnos del octavo semestre y recién egresados del programa de Psicología, muy motivados por aprender y aportar sus conocimientos durante la entrada de información, procesos de la investigación y producto final.

Entre los principales objetivos mencionó: contar con un marco para la generación de conocimientos sobre los comportamientos de riesgo; difundir a la comunidad publicaciones que describan, expliquen y analicen aspectos académicos; y nutrir de información a los departamentos y coordinaciones de carrera para formular estrategias de educación y servicio para reducir el impacto de riesgos durante la licenciatura y vida futura.

Un poco de historia

En el Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la Universidad de Guadalajara, en 2003 un grupo de investigadores realizaron el Estudio sobre comportamiento de riesgo de enfermedad y lesiones en estudiantes universitarios.

Este proyecto contemplaba un innovador procedimiento, que consistía en la aplicación en línea a los estudiantes inscritos en este centro.

En febrero del 2005 se aplicó por primera vez en el Centro Universitario del Sur una versión modificada del aplicado en el CUCS; en el 2006 los investigadores consideraron el valor que esto podría tener.

Así, en agosto del 2006 se aplicó en Cusur la primera versión que incluía un cuestionario de calidad de vida de la Universidad de Washigton, además de una nueva adaptación del comportamiento del riesgo; ese mismo año fue formalizado el primer observatorio.

En el 2013, el modelo de observatorio fue exportado a la Universidad de Playa Ancha, de Chile; en 2018, a la Universidad de la Frontera, en Chile, y en 2019, a la Universidad Autónoma de Baja California.

En el 2019 fue aprobado el proyecto similar de forma virtual en el campus Caborca de la Universidad de Sonora, y este 2020 iniciará operaciones en la Unidad Regional Norte.