Luz Haydeé Gaxiola Cabrera.
La familia es la primera estancia donde el estudiante empieza a relacionarse con otros seres humanos y a desarrollar lazos afectivos consigo mismo, sus allegados y con el medio ambiente en el que se desempeña, por ello la División de Ciencias Administrativas, Sociales y Agropecuarias de la Universidad de Sonora, campus Santa Ana, invitó a las mamás a su tradicional “Café por la mujer”.
En esta ocasión, el lema del evento fue “La importancia de la familia en la vida universitaria de sus hijos e hijas”, y se realizó la tarde del jueves 6 de octubre, organizado por el programa de Bienestar Psicológico y el Departamento de Ciencias Administrativas y Agropecuarias, con el apoyo de Vicerrectoría de la Unidad Regional Norte.
Refrendan compromiso.
Las madres de familia fueron recibidas por las autoridades universitarias, Leticia León Godínez, vicerrectora de la Unidad Regional Norte; Isidro Manzano Torres, Director de División de Ciencias Administrativas, Sociales y Agropecuarias; Félix Ayala Álvarez, jefe del Departamento de Ciencias Administrativas y Agropecuarias; Ana Bertha Martínez Durán, secretaria Administrativa y María Lizett Zolano Sánchez, coordinadora de los programas de Administración, Derecho y Educación del campus Santa Ana.
El Jefe del Departamento de Ciencias Administrativas y Agropecuarias, Félix Ayala Álvarez, abrió la tarde con unas palabras para las invitadas, destacando que el campus Santa Ana inicia sus actividades por el aniversario número 59 que celebra el 12 de octubre.
Por su parte, Leticia León Godínez dio la bienvenida a las damas y agradeció la confianza por seleccionar a la Universidad de Sonora para los estudios profesionales de sus hijos.
“Estén seguras de que todos estamos comprometidos en dar lo mejor para que puedan tener una buena trayectoria escolar, una buena formación y en su futuro sean excelentes profesionistas”, indicó.
El café fue dirigido a madres o tutoras de los alumnos, con el objetivo de generar una formación integral para los estudiantes, y prevenir la deserción escolar mediante el interés y participación de la familia en la trayectoria académica de sus hijos.
Además, Vanessa Lara González, responsable del programa de Bienestar Psicológico del campus Nogales, ofreció la conferencia motivacional titulada “La importancia de la familia en la vida universitaria de sus hijos e hijas”, donde las mamás participaron con sus puntos de vista y dudas que fueron aclaradas sobre la relación que existe entre sus hijos, la escuela y la familia.
Después de la charla, las invitadas disfrutaron de varios números musicales por parte de la estudiantina Nueva Juventud, quienes deleitaron al público con alegres melodías, mientras tomaban sus cafés y se conocían entre ellas, participando también en las dinámicas programadas para llevarse diversos souvenirs de la institución.
De esta forma, las mujeres pasaron la tarde al interior del campus Santa Ana, conocieron sus instalaciones, así como a las autoridades y personal operativo, quienes abrieron sus puertas, agradeciendo siempre la confianza depositada en la Universidad de Sonora.
La familia es la primera estancia donde el estudiante empieza a relacionarse con otros seres humanos y a desarrollar lazos afectivos consigo mismo, sus allegados y con el medio ambiente en el que se desempeña, por ello la División de Ciencias Administrativas, Sociales y Agropecuarias de la Universidad de Sonora, campus Santa Ana, invitó a las mamás a su tradicional “Café por la mujer”.
En esta ocasión, el lema del evento fue “La importancia de la familia en la vida universitaria de sus hijos e hijas”, y se realizó la tarde del jueves 6 de octubre, organizado por el programa de Bienestar Psicológico y el Departamento de Ciencias Administrativas y Agropecuarias, con el apoyo de Vicerrectoría de la Unidad Regional Norte.
Refrendan compromiso.
Las madres de familia fueron recibidas por las autoridades universitarias, Leticia León Godínez, vicerrectora de la Unidad Regional Norte; Isidro Manzano Torres, Director de División de Ciencias Administrativas, Sociales y Agropecuarias; Félix Ayala Álvarez, jefe del Departamento de Ciencias Administrativas y Agropecuarias; Ana Bertha Martínez Durán, secretaria Administrativa y María Lizett Zolano Sánchez, coordinadora de los programas de Administración, Derecho y Educación del campus Santa Ana.
El Jefe del Departamento de Ciencias Administrativas y Agropecuarias, Félix Ayala Álvarez, abrió la tarde con unas palabras para las invitadas, destacando que el campus Santa Ana inicia sus actividades por el aniversario número 59 que celebra el 12 de octubre.
Por su parte, Leticia León Godínez dio la bienvenida a las damas y agradeció la confianza por seleccionar a la Universidad de Sonora para los estudios profesionales de sus hijos.
“Estén seguras de que todos estamos comprometidos en dar lo mejor para que puedan tener una buena trayectoria escolar, una buena formación y en su futuro sean excelentes profesionistas”, indicó.
El café fue dirigido a madres o tutoras de los alumnos, con el objetivo de generar una formación integral para los estudiantes, y prevenir la deserción escolar mediante el interés y participación de la familia en la trayectoria académica de sus hijos.
Además, Vanessa Lara González, responsable del programa de Bienestar Psicológico del campus Nogales, ofreció la conferencia motivacional titulada “La importancia de la familia en la vida universitaria de sus hijos e hijas”, donde las mamás participaron con sus puntos de vista y dudas que fueron aclaradas sobre la relación que existe entre sus hijos, la escuela y la familia.
Después de la charla, las invitadas disfrutaron de varios números musicales por parte de la estudiantina Nueva Juventud, quienes deleitaron al público con alegres melodías, mientras tomaban sus cafés y se conocían entre ellas, participando también en las dinámicas programadas para llevarse diversos souvenirs de la institución.
De esta forma, las mujeres pasaron la tarde al interior del campus Santa Ana, conocieron sus instalaciones, así como a las autoridades y personal operativo, quienes abrieron sus puertas, agradeciendo siempre la confianza depositada en la Universidad de Sonora.